A Elena Pierard
No quise.
No quise decirte nada.
Vi en tus ojos dos arbolitos locos.
De brisa, de risa y de oro.
Se meneaban.
No quise.
No quise decirte nada.
Federico García Lorca
***
Suave estocada zurcida,
el hilo dorado
cierra un silencio la herida
del amor “matado”.
Tejes el tul, claro de fe,
vuela verónica,
y pierdo el sentido y ¡olé!
gritas eufórica.
Yo aún sigo tendido
esperando tu mano tendida,
su acero me ha vencido.
Mirada: Enciérrame en tu mantilla.
el hilo dorado
cierra un silencio la herida
del amor “matado”.
Tejes el tul, claro de fe,
vuela verónica,
y pierdo el sentido y ¡olé!
gritas eufórica.
Yo aún sigo tendido
esperando tu mano tendida,
su acero me ha vencido.
Mirada: Enciérrame en tu mantilla.
2 comentarios:
juju XD q bonitoooo!!! jaja bueno pues ya te habia prometido q iba a escribir aqui y por fin!!! jaja
bueno espero poder visitar tu blog mas seguido... te cuidas ^^ byee!!
¡Hola Elenita!
Me dio mucho gusto verte, gracias por visitarme espero apuntar nuevas cosas en mi blog para q lo visites.
Saludos
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